POESÍA

"Y aunque el canto que escuché hablaba de la guerra, de las hazañas heroicas de una generación entera de jóvenes latinoamericanos sacrificados, yo supe que por encima de todo hablaba del valor y de los espejos, del deseo y del placer. Y ese canto es nuestro amuleto."

-ROBERTO BOLAÑO

El otro cuerpo

Tengo otro cuerpo que se apodera de mí en las noches.

me observa durante el día

y en la memoria de lo que no he vivido se aferra

a mis inseguridades.

El otro cuerpo me ve en el espejo, riéndose

de mis sueños.

Ese otro cuerpo cambia, se ajusta, es moldeable.

Es mío pero no lo es,

porque solo es una idea de quien yo quiero ser.

Se ha levantado en la mañana y le pertenece a alguien más;

es el cuerpo que vive en los ojos de quienes me observan

y piensan

que todo lo que ven existe

y no hay nada más allá

de la barrera de mi otro cuerpo.

-Regina Checa

Ciclo de lo irremediable:

Las preguntas nacen en la noche,

alumbradas por la incertidumbre

y alimentadas por la ansiedad.

Crecen como musgo en el jardín:

Nadie sabe por qué;

Pero existen: Frescas,

Amenazantes,

Insistentes.

No son prefabricadas,

se multiplican como la espuma del mar:

Se asoman a la orilla de la lengua ;

Luego retornan al inmenso océano de la mente ,

Para romper las rocas de la valentía

y crear infinita arena de monólogo.

Todo tan suave

y aún así, golpean el alma;

La azotan

La destrozan.

son finitas,

porque nacen en la noche

en el seno de la incertidumbre.

Pero, cansadas de golpear el alma, perecen en el abismo del llanto,

sólo para arrojarse a olas del silencio ,

morir y ser enterradas por la quietud del sueño

en el jardín de la resignación.

-Karina R. Legaria

A veces,

ojalá ser sin nombre

sin recuerdos allegados

A veces,

ojalá dormir y despertar siempre

en un nuevo lugar.

A veces,

ojalá despegar la cabeza del cuerpo

el corazón salvaje y asustado del pecho.

A veces,

ojalá ser ojos y oídos,

ser piel,

sin pensamientos,

sin ideas.

Ojalá dejar salir la voz,

en grito,

en suspiro,

en notas.

Ojalá emigrar, sin retorno.

-Lía