EL ARTE DE ADUNA
Mi trabajo se basa en líneas, tintas, dolor, poemas, amor, ¿podríamos rayarnos?
Expreso mi alma libre y el poner lo que siento mediante una fotografía es irme de lo transparente a lo incierto, ¿me sigues?
El desnudo fotográfico para mi es la manera en la que el ser humano se ausenta de las mascaras y en ese pequeño momento solo carga con una y es la piel.
Se mezcla la poesía con la fotografía, así como puede representar un poema, también puede ser el poema. Escribí algo que dice “He escrito mis mejores poemas con arte roto, no te culpo, vivo de ello”, bueno, no hay mejor representación para lo que llevan mis obras.
Mi proceso creativo parte en dos, la realización de bocetos y la acción que es llevarla a cabo. Te hablaré de mi parte favorita, los bocetos; para esto te hablaré de mí.
Soy fotógrafa, poeta y chelera. Partí escribiendo canciones desde los diez años para en algún momento cantarlas, lo cuál no sucedió y conocí el rap, empecé a juntarme con personas de ese medio y no paraba de escribir, pero quería más, yo quería gritar, juguetear con los versos, que el tiempo no me definiera, cortar de tajo un sentimiento y descubrí que no quería hacer música, comencé a escribir poesía a los dieciséis años y a los diecisiete conocí la fotografía, le estudié tres años y fotografiaba de todo, pero no había rumbo, sin embargo mis primeros poemas terminados y mis primeras obras fotográficas fueron a los diecinueve, de ahí surge el “arte roto” porque agradecí tanto que me rompieran el corazón que termine muchos poemas, me adentre a la foto y conocí lo que es tomar chela.
La imaginación siempre me ha estallado, cuando la fotografía es el poema es:
“Léeme en líneas,
Léeme en fechas,
Léeme en horas,
Pero siempre léeme despacio.”
La foto jamás se va a leer a primera vista, pero yo además de generar esa primera percepción, trato de crear trazos que hablen además de la idea creativa.
Cuando la fotografía representa el poema no significa que así luzcan en imagen fija, sino representa una o varias esencias de una infinidad, no solo mía.
SIGUE EL TRABAJO DE ADUNA